domingo, 6 de marzo de 2011

REFLEXIONES

Las últimas 2 semanas fueron un torrente de cosas que suceden una tras otra. Viví experiencias en donde las emociones estaban a flor de piel, afloró el EGO que tan mal consejero suele ser, sobre todo cuando en vez de querer entender, comprender, aceptar, cada uno quiere demostrar su razón y que eso es lo único valedero, sin darnos cuenta cuanto se puede lastimar al otro, y una vez que las palabras ya son dichas y quedan grabadas, las grietas en el corazón empiezan a aparecer.  
Cuando nos dejamos manejar por las emociones, como se complica la vida.
Vivimos atravesados por nuestro sistema emocional, ahora la manera de poder tener una vida placentera, de tener el control de nuestras vidas es aprender a manejar nuestras emociones, dejar de ser controlados a pasar a tener el control.
Sé que es un esfuerzo lograrlo, también sé que se puede, pues es lo que hago cada día de mi vida, es lo que transmito en los cursos, y es en donde a lo largo del año se ven los cambios en los alumnos cuando empiezan a poner en práctica estos recursos.
El revisarnos, el reflexionar, buscar que es lo que hago "yo", dejar de poner el foco en el otro, entender que somos responsables de lo que generamos, más allá del comportamiento de la otra persona, si estamos siempre buscando el defecto en el afuera, nos enredamos en excusas, y nos salimos del centro.

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